Capítulo 28.

De repente sentí la mano de Niall rozar mi cuello para quitarme el auricular izquierdo, me estremecí al notar su fría mano en mi piel.──No te enfades.──Me volvió a repetir.

­­­­­­­­­­­­── ¿Qué no me enfade? Já.──Le dije soltando una irónica risa.──No me ha hecho ninguna gracia, creía que te habías ahogado o yo que sé qué.── Cogí el auricular que estaba en su mano, lo coloqué en su sitio y volví mi cara nuevamente. El no me hablo de nuevo y tampoco hizo nada hasta que noté como el sol ya no impactaba contra piel y gotas de aguas caían en mi cuerpo.  Abrí los ojos y me lo encontré ahí, encima de mí.── ¿Pero que haces?──Le dije extrañada. No me contestó solo se limitó a besar mis labios. Sus besos se desplazaron, besó mi mejilla derecha para después apoderarse de mi cuello, cualquiera que nos viera en esta situación pensaría cualquier cosa, pero en ese momento me daba exactamente igual que nos vieran, ¿es malo besarse? No. Llevé mis manos a su cara y atraje sus labios a los míos. Acariciaba sus mejillas lentamente pero me separé de el.── Aquí no.── Le dije para después poner mis manos en su pecho y empujarlo para que cayera en su toalla. Suspiró fuertemente y se quedó boca arriba mientras que yo me puse boca abajo. Noté como con su mano empezaba a hacer cosquillas en mi espalda.──Como sigas me voy a quedar dormida.──El solo rió pero no paró y así fue, me quedé dormida. Por suerte Niall se encargó de despertarme antes de ser víctima de una insolación. Ya me había dado bastante el sol en la espalda así que me di media vuelta.

──Vamos a bañarnos.──Me suplicó mientras me zarandeaba. Yo gruñí y a duras penas me levanté.

──Pareces un niño pequeño, ¿no te da vergüenza? Con 18 años que tienes.── Al decir eso negué con mi cabeza mientras caminábamos hasta el agua.

──Pues no, no me da vergüenza.──No me dio tiempo a contestar cuando ya se había lanzado de cabeza al mar salpicándome por completo. Salió a la superficie y se sacudió el pelo hacia atrás con sus manos, dios, cada día me parecía más sexy este chico.

Los días pasaban y entre los preparativos para la fiesta y mis encuentros furtivos con Niall, el sábado se me vino encima en menos tiempo del que habría creído. Ya era sábado por la mañana y me levanté después de una agradable noche, había dormido con Niall, pero solo dormir aunque cuando me levanté él no estaba a mi lado. Me metí en el baño, me miré al espejo y sonreí enormemente. Esta fiesta sería asombrosa, en toda esta semana me planteé si hacerla o no, pero Danielle y Els me convencieron y se haría la fiesta. Salí del baño ya arreglada y peinada y bajé las escaleras para desayunar pero cuando bajé me encontré con dos maletas en la puerta principal. Me acerqué a Niall el cuál estaba sentado en el sofá con la mirada perdida y me senté a su lado.

── ¿Qué pasa? ¿Por qué hay maletas en la puerta?──Le pregunté preocupada.

──Mi abuela se ha partido la cadera.── ¡Dios! Pobre mujer.──Y necesita ayuda, mi madre irá allí y pasará el fin de semana con ella.──Terminó de explicarme.

── ¿Y tu?──Le pregunté.

──Yo voy también.──Vale, ¿me dejaba sola?──Pero vuelvo esta noche.── ¿Me había leído la mente o qué? Me cogió la cabeza y me abrazó fuertemente como amaba que hiciera eso.──Volveré a eso de las una o una y media de la madrugada, entre que llego y todo, pero intentaré estar aquí lo antes posible.

──Tranquilo, tarda lo que sea, es tu abuela y…Y no quiero que corras con el coche.── Le advertí señalándole con el dedo, el rió.──No quiero que te pase nada.──Le dije sinceramente, aunque si tardaba más, perfecto así llegaría en el punto clave de la fiesta.

──Esta bien.──Dicho esto Maura bajó las escaleras.

──Perdónanos, por dejarte sola.──Me dijo Maura una vez abajo.

──No pasa nada, tranquila, yo estaré aquí y cuidaré la casa.──Le sonreí. Me abrazó fuertemente y salió por la puerta. Niall se acercó a mi, cogió mi cintura y me apegó a el para poder atacar mi labio inferior. Nos besábamos lentamente mientras que rozábamos nuestras lengua.

──Ni…Niall, te…Te tienes que…Que ir.──Le dije como pude entre besos. En ese instante oímos la bocina del coche. Me dio dos últimos besos en los labios y su perfecta anatomía despareció por la puerta. Una vez que me aseguré de que se habían ido corrí hacia mi habitación por mi móvil y llamé a Zayn.

──Dime.──Me contestó desde el otro lado de la línea.

──Ya podéis venir a por mí.──Le dije. El soltó u simple vale y colgó. Al cabo de unos veinte minutos ya estaban pegando a la puerta. Abrí y cerré la casa con llave. Metí las llaves en mi bolso y me aseguré de que llevaba las llaves de mi casa y el dinero. Me subí en el coche y saludé a Danielle y Eleanor las cuáles ya estaban dentro, me puse el cinturón y tomamos rumbo al supermercado.

──A ver, ¿qué compramos?──Preguntó Els.

──Vodka y Ron, ¿no?──Me preguntó Zayn mientras estábamos en la sección de bebidas alcohólicas.

──Si, coge cinco botellas de Vodka y cinco de Ron, aunque el Vodka es lo más “usual”.──Les contesté haciendo comillas con mis dedos. Ellos asintieron y empezamos a echar patatas, bebidas normales y también compramos las cosas necesarias para hacer bocadillos ya que una fiesta sin comida era como un jardín sin rosas. Cuando terminamos de comprar pusimos todas las bolsas en el maletero y fuimos rumbo a mi casa.