Toqué
levemente su puerta y el dejó ir un Adelante así que entré. Su torso
estaba desnudo pero poco pude apreciarlo porque se puso un polo rojo. Se dio la
vuelta y me miró de arriba abajo.
──Debo
decirte que estás increíble.──Pude notar como la sangre se acumulaba en mis
mejillas.
──Cállate
Horan. ──Le dije dedicándole una leve sonrisa.
──Solo
digo la verdad. ──Dicho esto cogió las llaves de su coche y se acercó a mí. ── ¿Vamos?
── Me preguntó mientras estiraba su brazo para decirme que saliera de la
habitación. Yo no contesté simplemente salí y me dirigí al piso de abajo.
Nos
despedimos de Maura y caminamos hasta el garaje para coger el coche y ponernos
en rumbo hacia el parque.
──
¿A qué hora te recojo? ──Me preguntó.
──Niall,
no eres mi chófer, puedo venirme andando.
──Mel,
a mi no me importan llevarte y recogerte, enserio. ──Quitó por un segundo la
vista de la carretera para mirarme y sonreírme.
──Bueno,
como quieras. ──Dije resignada. Al cabo de poco tiempo llegamos al parque donde
ya estaban las chicas mirando la hora desesperadamente. Las comprendía había
tardado un cuarto de hora más. Nos bajamos del coche y nos dirigimos hacia
ellas.
──
¡Lo siento! ──Exclamé cuando vi que me fulminaban con la mirada. ──Se me hizo
un poco tarde. ──Les hice un pequeño pucherito y vinieron a abrazarme
fuertemente.
──
¡Dios! Como sois, os visteis ayer y os abrazáis como si no os hubierais visto
desde hace mil años. ──Bufó Niall, que exagerado era.
──Nialler,
haz algo por el mundo y cállate. ──Dijo Els encendiendo un cigarro. ¿Ella
también fumaba? Niall me miró como diciendo “ni se te ocurra pedirle una
calada” yo aparté la mirada.
──Bueno,
me voy. A las 7 te recojo aquí. ──Dicho esto se acercó para darme un beso. Iba
directo a mis labios pero ladeé mi cara hacia un lado así que dejó su beso en
mi mejilla. Al separarse me miró confundido yo solo lo miraba sin decir nada.
El, se mordió su labio inferior, y me miro ¿decepcionado? ¿Triste? Dio media
vuelta, se subió al coche y se alejó hasta que lo perdí de vista.
──
¡Wow wow! ¡Te iba a besar! ¿Por qué le has quitado la cara? ¿Tú eres tonta? ──Preguntaron
las dos rápidamente.
──
¡Ay! Callaros. ──Les ordené para después mirar al suelo.
──
¿Has dejado que te lo cuente? ──Preguntó Danielle.
──No,
todavía no, no estoy preparada. ──Les dije tímidamente.
──
¿Y lo cuando se supone que lo vas a estar?
──
¡No sé! Ya llegará el día, ¡impacientes! ──Bromeé mientras caminábamos hasta el
restaurante.
──Seremos
impacientes, pero tú eres tonta. ──Me insulto Els. Yo le lancé una mirada de
odio.
──
¿Podemos cambiar de tema? ¿Por favor? Anda, dame una calada ──Supliqué.
──Está
bien, está bien. Toma. ──Se
la di. ── ¿Desde cuándo fumas tu?
──Desde hace
un tiempo, pero lo estoy dejando. Bueno…
¡Hablemos de la fiesta! ──Grité.
──Por cierto, ¿aún quieres
hacerla? ── Preguntó Danielle mientras levantaba sus cejas repetidamente. Sabía
perfectamente a lo que se refería.
──Por
supuesto que quiero hacerla. Aunque haya pasado lo que ha pasado…La voy a
hacer. Por cierto, hoy, nuestro querido Zayn ha venido a la casa de Niall e iba
a avisarle de que iba a hacer una fiesta. ── Dije recordando lo sucedido con
el. Mis amigas abrieron la boca lo más que pudieron. ── Pero tranquilas no le
dijo nada, ya que por suerte yo hablé con él antes de que hablara con Niall. ──Las
chicas relajaron sus facciones cosa que me hizo mucha gracia. ── Me dijo que el
sábado por la mañana iríamos a por las bebidas y demás, que él nos ayudaría a
llevarlas a mi casa. ──Las chicas asintieron.
──Perfecto…
¡¿Qué os vais a poner?! ──Exclamó Els emocionada. Eso fue el principio de toda
una tarde hablando de mi fiesta. Tendría que ser perfecta y sobre todo tenía
que hacer que Niall no se enterada de nada hasta que haya empezado la fiesta.
Eso era lo más difícil. Me imaginé su cara y no pude evitar reírme junto con
las chicas. Fuimos a ver unas tiendas que había cerca del restaurante y ellas
se compraron los pendientes para la fiesta. Yo ya sabía perfectamente que me
iba a poner. Nos lo estábamos pasando muy bien hasta que Els miró su reloj y
dejó escapar un pequeño grito.
──
¡¿Qué pasa?! ──Exclamamos Danielle y yo al unísono.
──Mel…Son
las 7 y media. ──Al decirme eso mi boca llegaba hasta el suelo.
──
¡¿Qué?! ¡Dios! ¡Niall me va a matar! ──Grité.
──Si,
a besos. ──Rieron mis amigas yo las miré con el ceño fruncido.
──
¡No tiene gracia! ¡Vámonos! ──Dicho esto salimos las tres corriendo y no
paramos hasta que llegamos al parque. Desde lejos pude ver a Niall sentado en
el banco mirando constantemente su reloj y la verdad, no tenía una cara muy
amistosa. No paramos de correr hasta que estábamos a escasos metros de el. El
se dio cuenta de nuestra presencia, normal, íbamos corriendo como nunca.
──Lo…siento,
Niall lo…Lo siento, de….Verdad. ──Le dije como pude ya que mi respiración no
era normal en ese instante.
──Si
Niall…Perdón…Ha…Ha sido nuestra culpa. ── Me defendió Danielle.
──Media
hora. ──Dijo Niall seriamente. ── Vámonos anda. ──Al decir esto echó a andar
hasta su coche y tan siquiera me esperó.
──Uuh…Suerte.
──Me dijeron mientras me abrazaban.
──Gracias.
──Suspiré. ──Las voy a necesitar. ──Les di un último beso y me dirigí hasta el
coche de Niall. Abrí la puerta, me senté y me puse le cinturón
──Niall,
de verdad, perdón. ──Esperé su respuesta pero nada, no me contestaba. ── ¿Niall?
¿Me oyes? ──Caso perdido. No me iba a contestar, ¿se había enfadado? ¿Por
llegar tarde? ¡Por Dios! ¿A él nunca le ha pasado o qué? El camino hasta la
casa fue en absoluto silencio, ninguno de los dos hablábamos, esto ya me estaba
empezando a preocupar, ¿por qué era tan bipolar? Cuando llegamos a la casa
dejamos el coche en el garaje y Niall salió de éste para meterse en la casa y
nuevamente ni me espero. Bufé para después emprender el camino hasta la casa.
Teníamos visita, estaban los tíos de Niall y sus primos pequeños. Yo los
conocía así que saludé y Maura me preguntó que tal me había ido y yo le
contesté con la verdad.
──
¿Frankie qué te pasa? ──Le pregunté preocupada al primo pequeño de Niall.
──Niall
ha subido a su habitación muy rápido, le he saludado y él me ha dicho Déjame enano. ──Me dijo el pequeño con lágrimas en sus ojos. Me partía el
corazón verlo así. Niall se había pasado.
──
¿Enserio? ──Pregunté, el pequeño solo asintió. Le di un abrazo para que dejara
de llorar. ──Venga, no llores, yo hablaré con el ¿vale? ──Asintió nuevamente.
Fui directa a su habitación, no toqué la puerta ni nada, simplemente entré. Él
estaba tirado en su cama, mirando al techo y con sus manos debajo de su cabeza.
Al escuchar el sonido de la puerta se levantó rápidamente.
──
¡¿Por qué le has hablado así a tu primo?! ──Le reproché, estaba indignada.
──
¿Y a ti que te importa? ──Me gritó.
──Pues
fíjate, si me importa, si estás enfadado por Dios sabrá que cosa no lo pagues
con Frankie. El pobre sólo quería saludarte y tú lo tratas así, ¿no te da
vergüenza? ¡Es tu primo Niall, es tu familia! ──Si el me gritaba yo no me
quedaría atrás.
──
¿Y tu me hablas de familia? La que casi mata a su hermana. ──Cuando dijo eso me
quedé en silencio mientras que mis ojos se llenaban de lágrimas las cuales
quise contener pero fue imposible.
jajajaj mel y la puntuaalidad...como te entiendo en eso ajajjaa:)
ResponderEliminaresaa fiesta promete...me da mieedo que dirá niall pero bueno, será divertido ver que pasa^^
lo de que niall se enfade...no se yo si ha sido por la media hora o por lo de el beso...pero lo de que casi mata a su hermana, ha sido un golpe Muy, pero que Muy Bajo guapo!
bueeno, dejo este comentaario txiki para poder leer el veeinte jejeje:)
unbeeso