Capítulo 10.

Niall POV

Salió prácticamente corriendo de mi habitación. Yo simplemente lleve mis manos a mi cabeza y alboroté mi pelo, estaba más que confundido, ¿Qué había hecho mal? ¿Fui demasiado rápido? ¡Ahh! Ya no sabía ni que pensar.

Lo único que sabía es que había sido el beso más perfecto de mi vida, sin duda lo que acababa de ocurrir era de un grado mayor, ya no era los típicos besos inocentes de niños de dieciséis años, era algo más y sin duda quería que pasara. Seguía enamorado de ella, era algo más que obvio, fue mi primer amor y lo sigue siendo, después de que se fuera había tenido algo más obviamente, pero ninguna como ella, ella era la indicada y eso no lo iba a cambiar ninguna otra aunque no estaba seguro si ella sentía lo mismo que yo por ella después de lo que pasó. Suspiré y me dirigí a mi armario y cogí mi preciada guitarra y empecé a tocar algunos acordes.

Melany POV

Pasé toda la mañana metida en mi habitación hasta que llegó Maura y nos avisó para comer. Tendría que verle la cara a Niall, definitivamente esta sería una comida incómoda. Abrí mi puerta y me encontré con Niall haciendo lo mismo, intenté que no se diera cuenta de mi presencia, pero fue inútil, se dio la vuelta y nos quedamos mirando por un rato. Yo fue la primera en quitar mi vista de la suya y miré distraídamente hacia los lados, ¡como si eso fuera a hacer algo! Lo peor no fue eso, si no que Niall no avanzaba se había quedado en frente de su habitación esperándome.

── He hablado con Eleanor. ── Me dijo, por lo menos no hablaba del otro tema.

──  ¿Ah sí? ¿Y qué te ha dicho? ── Le pregunté con curiosidad.

── Que cuando terminemos de comer te llevé al centro comercial, allí te estarán esperando. ── Me sonrió. Dios como me encantaba su sonrisa, estaba completamente enamorada de ella y de sus ojos.

── Ah. ──Alargué. ──Vale. ──Le sonreí también.

──Aquí tenéis la comida. ──Dijo Maura mientras colocaba la comida en la mesa. ──Me ha dicho Niall que hoy verás a Danielle y Eleanor ¿no? ──Me preguntó.

──Si, tengo muchas ganas de verlas. ──Sonreí ampliamente mientras Niall no me quitaba la mirada de encima.

──Normal. ──Apoyó Maura. ──Si queréis algo estoy en mi habitación. ──Nos sonrió, ¿Cómo? ¿Es que no comía con nosotros? ──Yo ya he comido en el trabajo, que aprovechéis. ── ¿Tanto se había notado mi cara de desconcierto?

──Vale mamá. ──Le dijo Niall. Maura se limitó a sonreír y acto seguido subió las escaleras.

Realmente esta era una situación muy incomoda, solo comíamos sin emitir palabra hasta que el decidió romper el silencio.

──Mel… ¿Te puedo preguntar algo? ──Me preguntó seriamente, hasta me dio miedo su mirada.

──Si…Supongo. ──Dije no muy segura.

── ¿Por qué estás aquí? ──Sabía que tarde o temprano me lo preguntaría.

──Pues, porque quería darme unas vacaciones.

──Sabes que no te creo. ──Joder, me conocía demasiado bien, para alguien que no me conocía era increíble mintiendo, el me conocía a la perfección como para saber que mentía.

──No estoy mintiendo. ──Dije seriamente, el solo me miró con una ceja levantada.

── ¿Pretendes que me crea que has venido de vacaciones? Si te hubieras tomado unas vacaciones no hubieras venido aquí ni loca. ── ¡Dios! Ya era demasiado conocimiento sobre mí.

──No quiero re…Recordar por qué estoy aquí Niall. ──Le dije mientras me levantaba con mi plato y mi vaso para ir a la cocina. El imitó mi actuar y me siguió.

── ¿Por qué? ¿Tan malo es? ¡Ni que hubieras matado a alguien!—Me dijo mientras se ponía a mi lado y apoyaba un brazo en la mesa de la cocina. Estaba demasiado cerca.

──Casi…──Le contesté, el simplemente abrió sus ojos como platos y se alejó un poco de mí. ── ¡Vamos Niall! No te alejes, no soy ninguna asesina. ──Le dije ofendida. El se acercó despacio. ── ¿Enserio quieres que te lo cuente? ──Le pregunté. El solo me cogió de la mano, al hacer esto todo mi cuerpo tembló. Me llevó al sofá y nos sentamos como indios, uno enfrente del otro.

──Tenemos tiempo. ──Me dijo sereno.

──Pero… ¿No me tienes que llevar con Danielle y Els? ──Le pregunté intentando zafarme de este momento.

──Ellas no saben a que hora hemos terminado de comer. ──Levantó unas de sus cejas como si eso fuera algo obvio, yo solo reí ante su comentario. Solté un simple ”Está bien”  y empecé con mi historia.